El pintor suizo Arnold Böcklin destacó por crear una imaginativa obra en la que aparece la música muy ligada a la muerte. Dejó una gran huella en algunos compositores.
Rachmaninoff compuso el poema sinfónico La isla de los muertos inspirada en el cuadro de Böcklin.
Max Reger, inspirado también por Böcklin, compuso Cuatro poemas tonales sobre Böcklin, uno de los cuales, el tercer movimiento, hace referencia a la isla de los muertos.
El autorretrato con la muerte es otra obra donde encontramos la muerte como inspiradora de la creación, casi como una musa. Alma Mahler explica que esta obra se inspiró en el Scherzo de la Cuarta Sinfonía de Gustav Mahler, donde el compositor utiliza una Scordatura. Eso es afinar las cuerdas del violín un tono más alto del que le corresponde con el objetivo de producir un efecto de "violín barato”, como dice Walter Piston.
martes, marzo 31, 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario